jueves, julio 19

Carita sucia.

"Que tienes ahi?" - dijo el dueño de la ferreteria. "No te corras!" - grito desesperadamente el. "Agarrala Miguel!" le dijo a su asistente. La niña intentaba de escabullirse por entre los pasillos de la ferreteria, casi ya llegando a la puerta para escapar con el rostro empapado en lagrimas Miguel la atrapa. El dueño la cogio por detras del polo y gritandole le dijo - "Pequeña ladrona, que haz de tener? 9 años y ya robando." Te voy a llevar a la comisaria para que te reprendan o mejor aun te metan a la carcel." La niña completamente atemorizada no hayaba palabras y tartamudeando le pedia perdon. El dueño la jala de la mano y cruzando la pista entra a la comisaria, pide hablar con el sargento. Entran a la oficina del sargento y de un manotazo sienta a la niña con fuerza. La niña sentada, temblando en lagrimas estaba muda y afligida. El dueño al lado derecho de ella y el sargento detras del escritorio. El dueño le explica lo sucedido. La niña cabizbaja mira fijamente el rodillo de hilo que sustrajo de la ferreteria sosteniendolo con ambas manos fuerte y pensativa. El dueño le quita con fuerza el rodillo de hilo de la manos y le muestra al sargento el objeto. "Ella entro a mi tienda y me robo esto!" - dijo el dueño. La niña lloriqueaba al oir todo ese alboroto. "Pero dime carita sucia porque te robaste el este rodillo de hilo?" - dijo el sargento. "Es una ratera!" - exclamo el dueño. "Silencio caballero" - le dijo el sargento al dueño. "Dime carita sucia porque te llevaste este simple rodillo de hilo de la tienda de este señor?" - pregunto el sargento. "Perdoneme mi sargento." - dijo carita sucia. "Perdoneme porfavor" - volvio a repetir la niña. "Solo necesitaba mas hilo para poder hacer llegar a mi blanca cometa alla, hacia el azul del cielo, alla a donde se ha ido mi hermosa mama." - con lagrimas en los ojos les conto carita sucia al dueño y al oficial. "Mi madre que se ha ido lejos y nos a dejado solos a mi y a mi pobre papa. Solo necesito un poco mas de hilo para hacerle llegar mi carta preguntandole porque se fue tan lejos de mi, tan lejos, dejandome tan sola, tan sola con mi pobre papa." - volvio a decir carita sucia. El dueño con lagrimas deslizandoles por sus mejillas sostuvo fuertemente a la niña. Le dio el rodillo de hilo y le prometio mas. "Una simple cartita que se la quiero hacer llegar ahi hacia el azul del cielo donde esta mi hermosa mama." - susurro la niña cabizbaja entre lagrimas. El sargento con ojos aguados se sento en su silla, respirando fuertemente y le dijo - "Anda lleva tu carta, dale el rodillo de hilo, que la carta ha de llegar. No te preocupes que tu bella madre estara ahi para leerla." La niña levanto el rostro con una sonrisa enorme y con el rodillo de hilo entre sus manos saco su cartita media sucia y arrugada se paro de la silla y le dio un beso al dueño en la mejilla y se marcho. El dueño impactado por tal relato se quedo estupefacto arrodillado al lado de la silla viendo como se marchaba la niña. Y la niña elevo su cometa tan alto con su cartita sujeta con un par de alfileres para su madre.

miércoles, julio 11

Añoranza.

Cada noche me despierto pensando que estas junto a mi,
Mirada fija a mi lado añorando que estes ahi,
Siento tu piel, tus manos, tu ser acariciandome,
Con los ojos cerrados me imagino tu entorno tocandome,
Aquel roce tan sutil y tierno que da apacibilidad,
Cuando al abrirlos abruptamente retorno a la realidad,
Aquella realidad que no me permite la estancia de tu cuerpo junto a mi,
Aquella estancia que no importe la distancia continua impregnada en mi.




(Reconocimiento JLB 1958)

lunes, julio 9

Engaño.

"¡Por la puta madre Mario! ¡¿Porqué mierda me tuviste que hacer esto?!" - gritó Ana desesperádamente. "¡Tranquila mi amor! Conversemos porfavor Ana", dijo intranquílamente Mario. "No me llames mi amor pedazo de mierda!" - exclamó entre dientes Ana. "Te lo puedo explicar todito", dijo Mario. "Mario tiene razón", hablo Soledad. "Tú te me callas golfa! Dices otra palabra y te mato, me oyes, te mato!" - gritó Ana. Atemorizádamente Soledad se arinconó en el borde de la cama con sus brazos alrededor de sus rodillas intentanto de cubrir sus senos descubiertos. "¡¿Qué explicación me vas a dar perro?!" - preguntó Ana. "¿Qué acaso de casualidad los dos estaban desnudos y se confundieron de habitación, y ¿cómo chucha terminó ella encima tuyo cachandote?, ¿Ah? ¡Responde mierda!" - dijo sarcásticamente Ana. "Tr...tr...tranquila porfavor", tartamudeó Mario. "Pinches cabrones, ¿cuanto tiempo lo han estado haciendo a mis espaldas?" - preguntó inquietamente Ana. Un silencio incómodo hubo en la habitación. La respiración de Ana se oía hasta afuera. Soledad llora sin cesar arrepintiéndose por lo hecho entre dientes. "Qué dices puta?" - preguntó Ana apuntándole el arma a Soledad. Soledad dió un grito. "Perdóname porfavor Ana, perdóname porfavor!" - dice rápidamente Soledad de rodillas y cabizbaja en la alfombra arañando tal. Mario con ambas manos le ruega a Ana que no sea estúpida y no cometa una tontería. "Mi amor te amo." - dijo Mario. "No seas tarado Mario, dices que me amas cuando te andas tirando a mi hermana." respondió rápidamente Ana. "¿Porqué Soledad, porqué hermana?" preguntó llorando sin calma Ana. "Ojala que ambos se pudran en el infierno!" - deseo en voz alta Ana. "Mario te aseguro que de aquí no van a salir bien." dijo Ana. Desde fuera una luz inmediata alumbro las cortinas del dormitorio y un disparo se oyó hasta los cielos. Soledad tiritaba atemorizadamente. Mario cubierto en una especie de polvo blanco. Ana disparó al techo haciendo un hueco y dispersando una espuma blanca por todo el dormitorio. Todos tosieron al unisono. "¡¡Ana!! La niña va a llegar o ¡¿ya llegó?!" dijo Mario. "¡Todavía falta imbecil no trates de cambiar el tema!" gritó Ana. "Ana porfavor piensa en la niña que se va a quedar sin padre, sin tia y con su madre tras rejas", dijo Soledad. Ana sonríe a medias. Algo tienes de cierto Soledad. La niña se va a quedar sin padre y sin tia. En lo que te equivocas es que su madre vaya a estar tras las rejas. Ahora suelta una sonrisa plena. "Pero An..." no termino Mario de hablar. El disparo retumbo por toda la habitación y había sangre desparramada en media cortina. Otro disparo se sintió inmediatamente ese fue dirigido a Mario que cayó de cara a la alfombra junto a su mesa de noche que tanto detesto cuando Ana lo obligó a comprar. Ana untada de sangre fue corriendo a la sala a ver si ya habia llegado su hija. Vió tras la ventana algunos niños sentados en una banca jugando con su nintendo. "¿Qué raro?" se preguntó a si misma. Por lo general esos niños se quedan ahí un buen rato despues de que el bus los haya dejado. De inmediato dirigió la mirada a la puerta y la vió sin seguro. Marilyn, asi se llama la niña, siempre deja la puerta sin seguro despues de que entra. Ana todavia no ha podido corregirle ese mal habito. "¡Marilyn!" dijo en voz alta atravezando las paredes. "¿Mi vida estás ahí?" preguntó nuevamente en voz alta Ana. Ana subía las escaleras lentamente vió la mochila de su hija en el pasadizo como usualmente la deja y sus zapatitos fuera del cuarto. Una luz intensa aparecia entre los bordes de la puerta semi abierta que provenia de la ventana del cuarto. Abrio la puerta lentamente y vio a Marilyn ensangrentada con la mirada vacia, como yendose de este mundo. El disparo al techo la habia atravesado. El telefono estaba colgando de su mano izquierda. Ana gritó y cuando se dirigía hacia Marilyn alguien la detiene de su brazo. "Alto!" dijo la persona tras de ella. Las sirenas de los policias se oian por toda la cuadra.

miércoles, julio 4

Muerte.

Temblaba sin parar. El olor a quemado estaba impregnado en mi. Podia ver el humo salir de entre mi. Nunca me lleve bien con el pero nunca habia de imaginar que tal sentmiento podria terminar de esta manera. Un timbre resonaba agudamente en mis oidos. Mis manos teñidas de rojo tiritaban sin cesar. Dedos entre abiertos y encogidos volvian a teñirse. La tarde anaranjada lograba verse en el techo por entre las persianas. Su mirada atemorizada me pedia perdon. En pleno verano y un frio aterrador. Mis extremidades hervian y mi torso frio. Mis parpados oscilaban mas seguido de lo normal. Veia que movia sus labios pero no oia nada. Perdon? Me parecio leer de sus labios. Se agarraba la cabeza y sus labios no cesaban de moverse. Ese timbre agudo disminuia poco a poco y el dolor aumentaba mas y mas. Un nudo en mi estomago y en mi garganta no me permitian completar ni una palabra y mis pensamientos iban tan rapido que no lograba recordar lo que queria decir hacia unos cuantos segundos. Sentia como mi muerte se acercaba. Aquel dolor punzante se agravaba mas y mas cada segundo que transcurria. El frio paso a ser helado y esa heladez ya no estaba solo en mi torso sino ya en todo mi cuerpo y se aproximaba a mi cabeza y lo sentia entrar por mi nuca. No dejaba de pensar en ella. Ella que me puso en esta situacion. Ella por la que di mi vida y mi muerte. Ella por la que rei y llore, ame y odie, vivi y mori. A mi izquierda vi unas luces rojas y azules. Significaba algo importante? No recordaba y no entendia nada. Ella? Solo ella, eso si entendia. Queria que este dolor lacerante cese de una vez por todas. Sentia que me iba, me iba, me iba. Una paz, un dolor, un frio y un calor me transcurria por el cuerpo, por mi alma, por mi ser. Ya no era mi nuca, era mi cabeza, eran mis ojos, era mi cuerpo, era mi vida...era yo.

jueves, junio 14

Cleptómano.

Sentado, en la oscuridad de la noche, en la silla que se retuerce al moverte frente a tu escritorio en tu cuarto. Aquel cuarto que ha sido tuyo toda tu vida, aunque no haya sido tanta. Te muerdes las uñas con impaciencia. Vés a tu alrededor y vés cosas por doquier; cosas que usas a diario, cosas que no son tuyas y aún más cosas que se te compró y nunca usaste. Te cuestionas - ¿porqué? ¿Tienes todo y acaso necesitas más? Entiendes que sufres de una enfermedad. Sigues mordiendote las uñas, ya casi terminando con la derecha y empezando con la izquierda. Continúa la mirada rebotante por tu dormitorio. Observando fíjamente tu escritorio donde se encuentran una variedad de cosas que sinceramente no deseabas, pero ¿porqué las tomaste? Te da temor ir de compras. Te da pavor aún mas salir a algún lugar con conocidos; especialmente con tus padres. Te averguenzas de ti mismo. No sabes como explicarselo a tus padres. No lo puedes compartir con nadie por que serías la burla de ellos y el colegio entero se reiría de ti. Aparte de la humillación que serias para tu familia y amigos. La sociedad no lo entendería. Puedes escuchar a tu madre exclamar -- "¡¿Pero porqué hijo mío, se te ha dado todo...qué más quieres?!". No te entenderían aunque dijeras que no es voluntáriamente ni por necesidad. Te espantas de ti mismo. Te haces creer a ti mismo que eres un monstruo y que no mereces vivir, por que eres una degracia para tus padres, hermanos y abuelos. Ya en la mano izquierda disfrutando con intensidad el dedo meñique. El pie derecho se mueve con rapidez de arriba a abajo, nerviosismo total. Su pie cesa de moverse y su mirada se fija al lado izquierdo del escritorio donde yace una hoja gillete. Ya no puedes más y te sientes culpable por todo. Te repugna verte al espejo y ya no sabes a quién de tus amigos hablar por que algo de sus casa ya haz de tener. Tu mano se aproxima con lentitidud a la gillete. Tu mano tiembla al acercarse y sudas con inquietud. Tus ojos dirigidos a la puerta para escuchar si alguien viene. Sostienes la gillete entre tus dedos. Extiendes tu mano izquierda estrecha encima del escritorio, el cual el dedo meñique te arde por haber arrancado las cutículas más de lo debido. Deslizas la gillete abriendo una herida en tus venas. Un frío recorre tu piel y una satisfacción inexpresable se hace dueña de tu cuerpo y pensamientos. Nuevamente decides volver a deslizar la gillete, ahora un poco mas abajo de donde la deslizaste la primera vez. Nuevamente el alivio recorre tu ser. Ahora viendo borroso y un poco adormecido decides continuar por tercera vez, cuando la puerta de tu dormitorio se abre. Rápidamente volteas a mirar quién interrumpió tal placer pero una luz blanca se adueño de ti y sentiste el caer libremente sobre unos brazos cálidos que te recordaban a tu madre.

martes, mayo 29

Pereciendo.

Toma la copa de vidrio con sutileza. Muy calmada y de nariz respingada. Se nota como desliza su rostro con suavidad y parpadea levemente sin ningún tipo de apuro. El dedo meñique se alza como si fuese reflejo. Sus piernas no cruzadas si no pegadas e inclinadas demuestran su elegancia. Aquel vestido negro de noche y escotado llamo la atención de todos los hombres en la sala incluyendo a los mozos y la envidia de las mujeres que la miraban de reojo. Su cabello semi dorado cubría la mitad de su rostro y cabizbaja con la copa en alto se notaba como derramaba una lágrima al brindar en silencio. Sus labios hermosos y coloreados rojo a perfección daban la impresión de una diosa. Sin levantar el rostro abre sus amenos ojos y bebe. Dejando la forma de sus labios impregnados en aquella copa que gozaba de ellos. Gentilmente baja la copa terminando su curso en la mesa cubierta en un mantel blanco con un radiante ramo de tulipanes en el centro. Su mano izquierda alrededor de la copa y la derecha empuñaba junto al mantel expresando un sentimiento de furor mudo. Tornó su cabeza en dirección a la puerta por donde aquel ingrato e infeliz salió. Regresó su resplandeciente mirada a la copa, semi llena pero para ella media vacía, con mirada fija parpadea y dos lágrimas brotan; una terminando en aquel mantel blanco y la otra deslizandose por su mejilla paulatínamente esperando terminar su recorrido junto a la otra pero esta desprevenídamente termina absorbiendose en un pañuelo perfumado de un gallardo, apuesto y varonil caballero que queda mirando fíjamente a la dama, sostiene la mano de su amada y le pide perdón.

lunes, mayo 21

Lo enfrentare.

A veces deseo levantarme de esta silla y huir. Irme lejos y alejarme de todo. En ciertos momentos de mi vida me han dado ataques alocados y lo he hecho. Me he ido pero he vuelto. No se si fue por cobardia o por que era joven y mis padres me querian de vuelta. Siempre siento esa ansiedad de tener paz, paz externa e interna. Hay tardes en las cuales me pongo mis zapatillas y me pongo a caminar. Me voy solo a andar por ahi a pensar. Bohemio me denominaria, pero a la vez en ambiente. Cuando salgo a una fiesta o algo me divierto si o ¿lo pretendo? no lo se. Mientras escribo esto tengo una ansiedad de largarme a caminar con mi cuaderno en mano para poder escribir pensamientos que cruzan por mi mente pero la responsabilidad no me lo permite. Necesito hacer tantas cosas pero no hago ninguna de ella y se acercan mas las fechas en las que tengo que enfrentar aquella la responsabililidad. Ya pronto me graduare. Tendre que enfrentar la vida como es, dura. Y no hay mas que pueda hacer sino enfrentarla y pelear con ella hasta que me acople a ella. Tengo temor no lo niego.

miércoles, mayo 16

Lamentablemente.

Lamentablemente la soledad se a vuelto mi aliada. Sin ella no podría estar. Me he acostumbrado a ella demasiado, tanto que cuando alguien se me acercaba ella venia y las alejaba. Ahora distanciado de la soledad, queriendo a alguien que se arrime, no hay. Ella quieta y fiel decide quedarse y no dejar que vuele. Requiero de alguien que me acompañe en esta jornada que se llama vida. Ya estoy cansado de rodeos y jueguitos, empece un juego que nunca debí haber empezado. Aquel juego me costo mucho, demasiado diría yo. Por querer vivir algo que ya vivido me doy cuenta que es una pura mierda; quisiera regresar cuando lo hice y darme un par de bofetadas para reaccionar. Lamentablemente es demasiado tarde y lo único que queda es empezar nuevamente. Lo pude hacer varias veces, tantas que no las puedo contar, pero soledad continúa ahuyentandolas. El juego continuaba. Ahora solo, desamparado y con necesidad de calor añoro aquellas noches que tuve ese calor, lo desperdicie e hice sufrir a ellas, perdón, mis más sinceras disculpas. Entiendo que es demasiado tarde para disculpas pero ahora, un poco tarde comprendo, he logrado entender. Soledad alejate de mí o por lo menos quedate quieta y permiteme encontrar. El juego ha terminado. Cuando se aparezca déjala en paz. Lamentablemente en este momento siento angustia y un nudo en mi pecho. La garganta se me tuerce y quiero llorar. Sinceramente lloro y la depresión no cesa. Un simple soliloquio constante cada noche, ella y yo. Vete y dejame dormir replico constantemente. Su brisa cesante me toca la piel, se me eriza y recuesto mi cabeza en ella. No la aguanto más.

domingo, mayo 6

Por curiosidad.


"Me muero de curiosidad de saber que sucederá" dice, piensa, sueña o soñará la gente. Siempre uno curioso por saber que pasó o que le pasará a uno ahora, mañana, en futuro cercano o lejano. Es algo innato en nosotros, me pregunto si durante el crecimiento se nos enseña de alguna manera indirecta ¿quizás? Hasta refranes hay, "La curiosidad mató al gato". Será que la curiosidad tenga que ver con la paz interna, ansiedad que siente uno o simplemente envidia. Supongo que hay distintas maneras o formas de curiosidad. El curioso intenso, el curioso descuidado, el curioso social y el curioso envidioso.

El curioso intenso es la tipicá persona que escucha un chisme y de inmediato corre a averiguar con lujo de detalles lo sucedido. No solo va a ver sino a propagar mas el rumor, lo agranda y de paso mete zizaña. Es como una adicción para el intenso por que cada día necesita escuchar algo que haya pasado con alguien, con ellos mismos, por su ciudad o basicamente en el mundo. Ejemplo las noticias, lo cual es algo muy bueno mantenerse enterado, pero volviendo al punto -- la curiosidad.

El curioso descuidado es aquella persona que pretende mantenerse al margen con los rumores pero cuando hay uno fresquesito no obstante y con delicadeza para el oido a escuchar. Simplemente se entera pero no habla. De curiosos escuchan pero no van a buscarla.

El curioso social es esa persona que realmente no le interesa en lo mas remoto pero igual escucha por curiosidad y se entera de aquellos rumores en eventos sociales y mas que chisme lo toman como tema de conversación. Ese tipo de persona que con un cocktail en la mano platicando gentilmente comentan acerca de lo ocurrido, jamás osarian a cotillear.

El curioso envidioso es aquel que bajo en autoestima y no complaciente consigo mismo va al rumor y en vez de desear el bien -- gruñe, amueca el rostro y pretende que no es nada comparado con lo que tienen ellos. Cuando en realidad siente envidia por que nunca han experimentado ese suceso y si por si acaso lo hayan hecho no habia sido de tal manera.

Envidia y curiosidad generalmente van de la mano. Obviamente hay casos distintos como el que probablemente usted esta pensando -- "¡yo no envidio!", diras. "Para nada", continúas. Puedes que estes en lo correcto como probablemente en lo incorrecto. ¿Quién sabe? lo unico acertado en todo esto es que la curiosidad esta en nosotros y es innato.

Asi que la próxima vez que te intrigue ver lo que tu mamá este cocinando o si tocan la puerta y te preguntes quien estara ahí, piensa en este simple blog de curiosidad. Por que tan solo por curiosidad entraste a leerlo.

martes, mayo 1

Decisiones.

Descontrolado por la vida. Deambulando por las calles oscuras y serenas, donde logras escuchar el viento soplar y hace que lagrimeén tus ojos. Una luz a la vista, intentas alcanzarla para no estar más en la oscuridad pero cada vez que te acercas parece que te alejasen de ella. Pasatiempo controlado, una vida al pie del reloj. Sigues caminando por esa vereda que no te lleva a ningún sitio solo al que tú realmente quieres llegar. ¿Realmente deseas ir ahí? Escuchas una voz que te lo repite constantemente. Piensas que si pero no estás seguro. Sigues deambulando, controlado por la redundancia de la vida que te empuja hacer cosas que verdaderamente no deseas hacer, logras metas no marcadas por uno sino por otros. ¿Qué es lo que deseo?, te cuestionas tú solo. La voz huida sigue ahí desapercibida. El camino continúa y calles empiezan aparecer cada vez que llegas a la próxima esquina. Ahora más que atrás. Mas calles hay, más opciones por donde ir. Más lugares por donde desviarte y no proseguir. ¿Será la correcta?, te cuestionas. La voz no dice ni una palabra y te deja solo en el camino. Empiezas a correr y aquella luz se aleja más y más. La oscuridad te amedrenta y con ojos aguados pides que te espere. "No hayas de preocupar", dice la voz. Estremecido por esta voz no respondes. Aquella continúa y tus oidos sordos. "Vete por aquí, vete por allá", es lo unico que escuchas y tú sin caso hacer sigues en lo que tú piensas correcto ¿lo será? A la lejanía ves la luz que se va perdiendo en la distancia. Llegas a una esquina, a una de las muchas calles, hay una luz. Decides voltear sin pensarlo dos veces. Ahora desviado, sin sentido alguno del como volver decides proseguir y sobrepasar esos baches que dificultan tu camino. Esa luz, esa luz turbia que oscila como si se quisiese apagar. "¿Ahora qué?", te preguntas. "Vete por allá", dice la voz. Ahora si le haces caso ya que perdiste noción de la salida y solo buscas un consejo que te ayude a poder continuar en tu camino aunque no sea el correcto.

martes, abril 10

Una caminata.

Una caminata para olvidar,

una caminata para pensar;

una caminata para despejarme,

una caminata para el dolor desgarrarme;

una caminata sincera,

una caminata a mi manera;

una caminata para volar,

una caminata para llorar.

Solo y desolado,

querer tenerte a mi lado;

sueño, añoro e imploro,

el dolor continua intensamente y yo solo;

hasta hace poco hubiera vuelto,

agarrarte fuerte y ni loco te suelto;

pero ya es muy tarde,

decidiste alejarte y con nuestro amor terminaste;

algun dia te daras cuenta que perdiste el amor de tu vida y para volver contigo me tendras que rogar y sufrir tanto y tanto como yo he sufrido estas semanas que te dolera el alma y la vida.

Aunque me duela como mierda decirte que no,

asi sera porque el amor se perdio

Por la noche.


Por la noche caminando entre la oscuridad viendo como un foco en la calle oscila hasta apagarse. Temor de dia viviendo de noche. Pasar desapercibido entre la gente preocupada en lo suyo y tu en lo de ellos. Observando cuidadosamente la vida y el trancurrir de la gente. Mujer de noche, hombre de noche, niño de noche, mi vida de noche. Un apagon despues de ciertas horas de trabajo. Hora de descanso? Hora de vivir? Dando pasos alternos uno en la acera otro en la pista. Mirada perpejlada entre la oscuridad. Oscuridad entera, oscuridad interna, oscuridad mia y oscuridad tuya. Enciendo un cigarro y exhalo, observo como se desvanece el humo en la oscuridad. De noche, vida distinta, vidas similares, cercanas pero lejanas. Desamparado, sentado en la acera viendo a mi izquierda con temor esperandolo. Mis brazos enganchados en mis rodillas veo hacia abajo y aquel punto naranja en medio de la oscuridad ceso.

jueves, marzo 22

Mis Lineas.

Entre el ayer y hoy

hay una gran alianza,

entre hoy y el mañana

hay un gran abismo.



Lluvia.

**Analogias**

º Punto de vista de un angulo imprevisto º

Agua, gotas de agua, que vienen desde el cielo deslizandose cuidadosamente entre la brisa que corre a la distancia cerca al suelo. Pareciera una lagrima de aquel Hombre que no debe llorar.
Aquella agua que limpia nuestras impurezas y nos permite proseguir nuestro camino. Sentado en esta silla con mi libreta en la mano mirada arriba viendo simplemente como esta agua baja a no mojar si no a limpiar y extraer aquello indeseado. Aquella agua que acaricia nuestro tierno ser. Mis ojos fijamente intentan de ver aquel transcurso que esa gota hace, pero se les es imposible de ver. Apreciando la textura de tal me cuestiono al bajar mi rostro analizando a la gente que cubriendose y amuecando gestos desprecia tal maravilla. Seran aquellas personas que como una vez me dijo un pastor, yo siendo ahora no creyente -- personas que viven en pecado constante. Es esa gente que su vida transcurre al mando de un reloj (aparato construido por el hombre) y todo esta preplaneado para ellos. Al recibir esta gota de agua bendita es un alivio, tal debe ser inrechazable como otros han de hacer. Mirando con vista corta pero penentrante a esta gota que se desliza por mi rostro pienso en el simple pero complejo procedimiento que la naturaleza ha tenido que proporcionar para que esta simple gota ahora en mis labios empiece su transcurso en lo alto y lo termine a mi lado.


Sin Titulo.

Con tranquilidad para el mañana, no hay prisa.

¿Porqué esperar con ansias el mañana?

¿Será mañana el día?

¿Será mañana quién decida?

¿Será mañana el momento?

Que el mañana diga...